Hacia la elección de nuevo Papa
sábado, julio 29, 2006
Wenley Palacios

sepelio de juan pablo ii.jpg

     Bernardino dejó su cerveza sobre la mesa del jardín: “es pronto para juzgar a un hombre con tanto carisma que lo tienen por santo. De pequeño vi al Pastor Angélico, Pío XII, pio xii.gifcon los brazos abiertos en medio de la gente, implorando el cese de los bombardeos sobre Roma. Los cardenales que eligieron a Pacelli tardaron solo un día. Cuando estudiaba en el Colegio Apolinar ya destacaba entre sus compañeros. Luego, eligieron un Papa de transición, pero el Espíritu Santo tenía otros planes. Roncali, que deseaba ser cura de pueblo, fue un magnífico diplomático y un Papa decisivo. Dentro del Cónclave, Juan XXIII comenzó los cambios, cuando llegó la “primera adoración” impidió que los Cardenales besaran su pie y antes de salir dijo que las excomuniones eran cosa del pasado. Se mezcló con la gente, visitó presos y enfermos. Ha sido proclamado Beato y se le conoce por el Papa Bueno. Fue el gran impulsor del agiornamiento de la Iglesia, quería que el mensaje de juan xxiii b.jpgJesucristo se transmitiera, a las gentes de este tiempo, de forma que lo entiendan. La Curia le hacía poco caso, así que convocó el Concilio Vaticano II, abrió la Iglesia a todo el mundo, a todas las religiones, dejó que cada cual expusiera lo que pensaba según su experiencia y la armó. Tras la apertura del Concilio el 11.10.1962, desde su ventana, aquella hermosa noche de luna llena que bañaba a los fieles en la Plaza de San Pedro, los bendijo: “al volver a casa encontrareís a los niños. Haced una caricia a vuestros niños y decid: ésta es la caricia del Papa”. Su sucesor, Pablo VI, que concluyó las tareas conciliares, falleció sin poder terminar, en la práctica diaria, el encaje de la verdad evangélica en el nuevo mensaje. Durante 33 días le sucedió Juan Pablo I, luego fue eligido un Cardenal polaco, Karol Wojtyla”.

     “Llamar a Juan Pablo II el Grande es una definición exacta. Ha ocupado telediarios, primeras páginas de la prensa, ha viajado por todo el mundo, se ha entrevistado con Presidentes de casi todas las naciones y ha llenado los aeropuertos con millones de fieles”. Pablo le tomó la palabra a Antonio: “También es el Papa de la Libertad, por su intervención en la caída del comunismo en Polonia y en muchos países de la Europa Oriental; y por su condena a toda clase de terrorismo. Ha sido decisivo para cambiar la Historia”.

     Emeterio dejó dos platos con aperitivos en la mesa, era el lunes de San Vicente, Patrón de nuestra Comunidad: “Nací en el altiplano, estudié allí y, como sabéis, me he tomado un tiempo antes de cantar misa. Después del Vaticano II, que tanta esperanza creó, acabajuan pablo ii.gif ahora un largo cuarto de siglo en reposo. Hay que llevar a la gente a las iglesias, donde no se ve a los jóvenes, ni a los de mediana edad. Los problemas que aparecieron tras el Concilio, no los han resuelto las viejas normas de la moral, que no conectan con el mundo de hoy, ni en las sociedades europeas, ni en las anchas y profundas áreas sudamericanas, ni en las tórridas estepas y selvas africanas. Está pendiente el sacerdocio de la mujer. Las distintas clases de familias que hay en el mundo, no se parecen en nada a la que protegía el Derecho Romano y asumió la Iglesia tras la Batalla del Puente Milvio, en un pacto político con Constantino. Hay problemas de natalidad en China, India y todo el tercer mundo; y el del sida. Para solucionar la cuestión del hambre, no son suficiente los misioneros, ni las oeneges; desde la pompa de Roma y las concentraciones en aeropuertos, es difícil entender a los que mueren de hambre cada segundo que pasa. Hay que ser de allá y, sobre todo, estar allá”.

     Todos le miraron y admiraron su claridad y su atrevimiento. Emeterio inclinó la cabeza: “Rezo para que el Espíritu Santo nos traiga un Papa para el mundo del s. XXI, que entienda los problemas de la gente y derrame sobre ellos, no prohibiciones y fuegos eternos, sino comprensión y amor”.

15 de abril de 2.005, Diario "El Mediterraneo".

Article originally appeared on Wenley Palacios - Libertad día a día (http://wenley.squarespace.com/).
See website for complete article licensing information.