! ES LA ECONOMÍA, IMBÉCIL ¡

Engañaste a Carod Rovira, luego a Artur Mas y lograste sacar el anticonstitucional Estatut, pero tienes razón Pepeluí, eso sólo interesa a los políticos, apenas lo votaron el 30% de los catalanes. Después del atentado de la T-4 con dos muertos, juraste que era el fin del diálogo con ETA y también mentiste, esta vez a todos. Te llaman “Zapatero embustero”. No pongas mala cara, en otro país con una democracia madura, hubieras tenido que dimitir. . Has presumido de dar papeles para todos los emigrantes. ¡Te metes en unos berenjenales! Ahora buscas aliados en Europa para detener el efecto llamada, que provocaste. Has sacado dos leyes buenas, la de violencia de género y la de dependencia, pero no las has dotado económicamente y son ineficaces. Eres una calamidad. Tu crees que todo eso no te restará votos, porque recuerdas cómo en las elecciones de 1992 en EEUU se enfrentaron el multimillonario Ross Perot; Bush padre, muy popular tras la Guerra de Golfo, pero con la economía en recesión; y Bill Clinton que hablaba de las preocupaciones del ciudadano que no llegaba a fin de mes, y cómo en uno de los debates televisivos achantó a Bush: ¡Es la economía, idiota! Acertó, fue elegido Presidente.
Sabes que ganará las elecciones quien convenza al votante que puede mejorar su bolsillo. Con la construcción, la banca y la bolsa en crisis, el ciudadano se asusta un poco pero sólo se encoje de hombros. Lo malo es que, desde hace unos meses, con el aumento de las hipotecas y del precio de los alimentos, la crisis ha llegado a su bolsillo. Recuerdo cuando en 2004 Jordi Sevilla te iba a explicar la economía en un par de tardes, porque estabas pez. No te gustó y lo enviaste a Castellón. ¡Qué manía con estas tierras! No tienes bastante con quitarnos el agua, eliminarnos de las nuevas estructuras y dejarnos sin AVE. Claro que peor tratas a Valencia que le has enviado a Maritere. Como nos fríes a impuestos, al Estado le sobra dinero y ahora prometes devolvernos 400 euros por cabeza si te votamos. Pepeluí quieres comprarnos el voto con nuestro dinero. No digas que no, que ya no te cree nadie. Eso no son medidas económicas, es viejo caciquismo. Ni tu ni Solbes podeis arreglar la economía porque no reconoceis que va mal. Al llegar Aznar no había dinero para pagar las pensiones ni los sueldos de los funcionarios. Solbes ¿te acuerdas? Hubo que pedir un préstamo. A los dos años entramos en la zona euro y se crearon cinco millones de puestos de trabajo. Pepeluí, has fracasado en tus políticas estrella, el Estatuto Catalán, los emigrantes y la negociación con ETA; no crees en la Nación Española, ni en su bandera; has impuesto un sistema educativo que lleva al fracaso escolar y elimina los valores básicos del estimulo y la competitividad; no proteges a la familia; y nos mientes constantemente. Nadie se fía de ti, pero, hay otra opción.
Rajoy bajará los impuestos, quiere que el Estado tome menos dinero de cada contribuyente, que tendrá más en su bolsillo para vivir mejor. Es un político previsible, patriota, independiente, moderado, resolutivo, siempre dice la verdad e informa. Es la hora del ciudadano, él elige y vota. Adiós Pepeluí.
5 de febrero de 2008. Diario "Mediterráneo".
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